El pasado jueves 31 de octubre, se determinó en la Cámara de Primera de lo Penal de San Salvador que tocarle los genitales a una niña no es un delito, al definir la interacción sexual de Jaime Escalante con una niña de 10 años como una falta denominada «actos contrarios a las buenas costumbres y el decoro público» y no un delito.
BBC menciona que la investigación de la Fiscalía salvadoreña indica que «el magistrado de la Cámara de Tercera de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia, Jaime Escalante, tomó de los hombros a una niña de 10 años que jugaba en la residencial Altavista II del municipio de Tonacatepeque, al norte de la capital San Salvador, y le tocó la vulva«.
Escalante logró alcanzar su vehículo y escapar después de ser asechado por la madre de la niña, quien lo denunció a las autoridades inmediatamente por cometer un delito de agresión sexual a una menor.
La Cámara de Primera de lo Penal de San Salvador resolvió que la acción de Escalante no es un delito, sino un «acto contrario a las buenas costumbres y el decoro público», lo que implica una multa entre 10 y 30 días. La defensa argumentó que «el tocamiento no pone en riesgo la intimidad o libertad sexual de la persona».
«El abuso sexual implica toda interacción sexual en la que el consentimiento no existe o no puede ser dado (…)».
Definición de «abuso sexual» según la UNICEF
Tras la resolución de la Cámara, muchas personas se han unido para buscar justicia. En las redes sociales ha circulado los hashtags: #TocarNiñasEsDelito y #LasNiñasNoSeTocan. Además, el lunes 4 de noviembre se realizó una manifestación frente al Centro Judicial Isidro Menéndez.
Nayib Bukele, presidente de El Salvador, le pidió a la Corte Suprema de Justicia que investigue la decisión de la Cámara de Primera de lo Penal por medio de un tweet.
La Cámara publicó un comunicado en el cual justifico su decisión como un acto «apegado a la Constitución de la República, convenciones de los Derechos Humanos y la Ley». Además, le pidió a Bukele que «respetara la independencia judicial», a lo que el magistrado respondió que se tomarán todas las medidas necesarias para que se haga justicia.
La UNICEF indica que «el abuso sexual ocurre cuando un niño es utilizado para la estimulación sexual de su agresor (un adulto conocido o desconocido, un pariente u otro niño, niña y adolescente) o la gratificación de un observador. Implica toda interacción sexual en la que el consentimiento no existe o no puede ser dado, independientemente de si el niño entiende la naturaleza sexual de la actividad e incluso cuando no muestre signos de rechazo».
Fuente: UNICEF; «Abuso sexual contra niños, niñas y adolescentes: Una guía para tomar acciones y proteger sus derechos»; (2016), [en línea].