La lactosa es un componente que tiene la leche de vaca que puede ser empleada en la industria farmacológica y en alimentación.
Muchas personas creen innecesario incluir la leche de vaca en su dieta o son intolerantes a ella y han optado por interrumpir la ingesta de este alimento. Pero existen alternativas que se pueden consumir y nos brindan valores nutricionales a nuestro organismo.
A continuación te mencionamos 6 alternativas que puedes incluir en tu dieta y sustituir la leche de vaca.
La leche de almendras tiene vitamina E y vitamina B12, a pesar que tiene muy poca proteína, no contiene colesterol ni lactosa y aporta muy poca grasa en su ingesta.
Esta leche es enriquecida con vitaminas B12, hierro, calcio, vitamina B3. Se obtiene moliendo y filtrando grado de arroz integral. Es muy buen sustituto para personas con intolerancia a la lactosa o alérgicos a los frutos secos.
La leche de avena es una fuente de fibra, vitamina B, no tiene colesterol ni lactosa y tiene muy poca grasa . Es ideal para las personas que necesitan hacer esfuerzo intelectual, también tiene aminácidos esenciales y una buena dosis de energía.
La leche de coco aporta Calcio, Fósforo, Potasio, Magnesio, Selenio, Ácido Fólico, Hierro, Vitamina C, E, B1, B6, B5 y B3. Por su contenido calórico no se recomienda ingerir todos los días, pero con moderación, es una muy beneficiosa bebida.
La leche deslactosada es una producto sometido a un proceso que transforma la mayor parte de la lactosa en glucosa y galactosa, para que así pueda ser consumida por las personas que padecen intolerancia a la lactosa.
Es considerada como uno de los mejores sustitutos de la leche de vaca, no contiene colesterol y tiene poca grasa. Es el sustituto ideal para vegetarianos o para personas que padezcan intolerancia a la lactosa, contiene B12 y fitoestrógenos muy beneficiosos para la salud.