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La prediabetes se presenta cuando el nivel de glucosa en la sangre es más alto de lo normal, pero no lo suficiente para ser una diabetes. En esta situación no se necesitan medicamentos, pero si cambiar el estilo de vida con una mejor alimentación, más ejercicio o perder de peso.
Esto ayudará a reducir la glucosa sanguínea hasta un nivel más sano y a prevenir la diabetes, la cual se presenta cuando hay demasiada azúcar en la sangre.
Existen varios tipos de diabetes, el más común es la diabetes tipo 2, que se desarrolla cuando el cuerpo ya no puede producir suficiente insulina para mantener a la glucosa sanguínea en un nivel sano, o cuando las células corporales se vuelven resistentes a la insulina.
Los médicos pueden diagnosticar la diabetes mediante varios exámenes diferentes, uno de los más comunes es el análisis de la glucosa sanguínea en ayunas, mediante la extracción de una muestra de sangre.
Los factores de riesgo más importantes para la diabetes son el exceso de peso, la inactividad y la edad. A pesar de que la diabetes puede desarrollarse a cualquier edad, el riesgo aumenta a medida que uno envejece, especialmente después de los 45 años.
Aún si no tienes sobrepeso puedes estar en riesgo de tener diabetes. Por lo tanto, es importante hacer del ejercicio una prioridad. No tiene que ser una sesión de ejercicio vigoroso, puede ser una caminata rápida, una vuelta en bicicleta u otra que lo ayude a moverse. 30 minutos diarios de ejercicio moderado será ideal.
Mejora tu alimentación, concentrándose en alimentos bajos en grasa y altos en fibra. Enfóquese en comer frutas, verduras y cereales integrales.
Es importante que te hagas revisar regularmente la glucosa sanguínea. Conversa con tu médico acerca de la frecuencia con la que te debes analizar la glucosa sanguínea.
