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Perder la Paciencia es perder la batalla

abril 17, 2018
A que no sabías Vida, 
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Perder la Paciencia es perder la batalla. Todos los días libramos batallas contra nuestras circunstancias, esquivando las dificultades de la vida moderna, yendo contra corriente con la finalidad de reafirmarnos a nosotros mismos y nuestros valores. Pero los retos que suponen todos esos factores son algo con lo que hay que liderar y necesitan un gran esfuerzo, necesitan paciencia.

Y es que el reto no solo tiene que ver con todo a lo que nos enfrentamos, también es un reto lidiar con nuestro temperamento y carácter, muchas veces podemos llegar a reaccionar de formas poco adecuadas agravando alguna situación o ya de plano estancándonos frente a los problemas.  La paciencia es ese “Santo Grial” que muchos persiguen, pero muy pocos logran obtener, acaso ¿la paciencia es para algunos pocos elegidos?

La respuesta es No,

Todos tenemos la posibilidad de desarrollar esta virtud, el problema consiste en que requiere esfuerzo y voluntad. Para adquirir la paciencia necesitas cultivar ciertos hábitos positivos, como empezar a vivir de manera menos frenética. Cuando se vive corriendo por la vida es muy fácil perder la paciencia y el control cuando algo no marcha como se desea y al tiempo que se desea, necesitas entender que cada cosa toma su tiempo y que también se presenta de mejor manera en tiempos puntuales. Ser arrebatado y exigir que todo marche a la velocidad deseada solo te llevará a descarrilar todo tu trabajo hacia una espiral de malas decisiones que culminarán con un posible fracaso que pudo ser evitado.

Necesitas cultivar el auto dominio, no debes de dejarte llevar por tu propia visceralidad, ser arrastrado por tus pasiones, necesitas aprender a identificar tus verdaderas necesidades y emociones frente a los deseos e impulsos. Tener paciencia es aprender a tener control y dominio por sobre los instintos más básicos.

Para desarrollar la paciencia necesitas aprender a ser constante. Todos nos maravillamos al ver un rascacielos enorme que se alza imponente en el cielo, pero nadie o muy pocos ponen su atención a cada ladrillo, cada viga y cada tornillo que sostienen ese rascacielos. Los grandes logros, las grandes batallas no se ganan de la noche a la mañana, requieren mucho tiempo y esfuerzo para concretarlas. Se constante y coloca un ladrillo a la vez en tu vida.

Si quieres ganar las batallas que te presenta la vida a diario, necesitas empezar a cultivar la paciencia, ser paciente te convertirá en un hombre o mujer de éxito.

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