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*Foto de portada vía Congreso de la República
Ha sido un año difícil para Guatemala; no solo la pandemia del COVID-19 ha afectado la salud y seguridad de los guatemaltecos, también las depresiones tropicales causadas por el huracán Eta y ahora, por el huracán Iota, han desatado una serie de problemas en toda la república.
Ante este catastrófico panorama, en un país donde actualmente muchísimos guatemaltecos se están muriendo de hambre, el Congreso de la República llevó acabo una sesión entre la noche del 17 de noviembre y la madrugada del día siguiente para aprobar el Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado para el Ejercicio Fiscal 2021, cuando los ciudadanos se encontraban dormidos.
La votación publicada por el Congreso indica que 110 diputados votaron a favor, 26 en contra, 18 congresistas ausentes y 6 con licencia. Según los datos oficiales, 10 legisladores votaron en contra de la aprobación final del Decreto 33-2020 a las 5:30 horas de la madrugada.
Los ciudadanos se percataron de lo sucedido durante la mañana del 18 de noviembre y desde entonces, la aprobación del presupuesto por parte de los legisladores se ha vuelto un tema de tendencia.
El Decreto 33-2020 establece que de los Q99 mil 700 millones; Q63,560,566,071 van para funcionamiento y Q20,234,107,104 están destinados para inversión; el resto es para deuda pública.
Samuel Pérez, de la bancada Semilla, criticó el nuevo presupuesto para el próximo año y manifestó que dudaba que los diputados habían leído las 127 páginas.
«Hoy se está cometiendo una de las más grandes atrocidades en la historia de Guatemala», expresó Pérez. «Hasta hoy se conocieron las modificaciones en el presupuesto del Ministerio de Finanzas», agregó.
«En Guatemala la crisis es la normalidad; la normalidad es el 60% de pobreza o el 40% de desnutrición infantil… esa es la normalidad a la cual nos regresa este presupuesto», manifestó Pérez.
Se aprobó una deuda de 31 millones 072.7 millones de quetzales, se le restaron recursos a la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) y a organizaciones que luchan contra la desnutrición en Guatemala, se aprobaron dos préstamos que suman 4 mil 908 millones, y se incrementó el gasto del Ministerio de Comunicaciones a 2 mil millones de quetzales.
A través de las redes sociales se convocó un manifestación pacífica frente al Congreso de la República, la Plaza de la Constitución y desde las redes sociales para que los diputados modifiquen el presupuesto.
Asimismo, figuras públicas de Guatemala como Francisco Páez, de la banda Malacates Trébol Shop, y la chef Mirciny Moliviatis le han hecho un llamado a la población para que se unan este sábado 21 de noviembre a las 14:00 horas a la manifestación.
“Mientras nosotros dormíamos, quitaron Q200 millones que iban destinados a combatir la desnutrición», comentó Páez.
«Esta aprobación del presupuesto a puerta cerrada cuando tú y yo estábamos durmiendo, no es justa ni válida», expresó Moliviatis.
El presidente Alejandro Giammattei desmintió las acusaciones de corrupción por parte de los ciudadanos a través de una cadena nacional, la noche del 18 de noviembre. Asimismo, reafirmó su esfuerzo para combatir la desnutrición.
«El presupuesto aprobado por el Congreso de la República incluye 200 mil millos de quetzales destinadas a la gran cruzada por la desnutrición», indicó el mandatario.
Sin embargo, muchos guatemaltecos aún dudan la transparencia del presidente de la nación y, desde luego, la de los legisladores que votaron a favor de la aprobación del Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado para el Ejercicio Fiscal 2021.
