El abuso infantil ocurre cuando una madre, padre o cualquier otro adulto causa un daño físico o emocional a un niño.
En términos generales, el abuso de niños puede tomar varias formas:
Abuso físico
Abuso sexual
Negligencia y/o abandono
Abuso emocional y/o psicológico
Es importante que sepamos que es cada uno de los abuso, para saber detectarlos a tiempo o denunciar inmediatamente.
Abuso físico
Cuando la gente piensa en el abuso de niños, inmediatamente lo asocia con el abuso físico con acciones como: pegar, patear, golpearlos fuertemente, etc, pero tenemos que dejar claro que no sólo es eso. El abuso físico también incluye:
Pegarle constantemente en la cabeza y expresarle que es un tonto.
Quemar intencionalmente a un niño con fuego o con agua hirviendo
Lanzar un objeto contra el niño o utilizar un objeto para golpearlo.
Hacer pasar hambre a un niño o no proporcionarle comida.
SIGNOS DE MALTRATO FÍSICO
Es importante que observes en un niño este tipo de signos:
Cambio repentino en el comportamiento o rendimiento en la escuela
Estado de alerta, en espera de que algo malo suceda
Mal comportamiento
No querer regresar a la casa donde es maltratado.
Temor cuando se le acerca un adulto
No dormir
Los dibujos son elementos donde los niños logran expresarse.
Abuso sexual
El abuso sexual ocurre cuando un niño es violado u obligado a realizar un acto sexual. Pero también es cualquier tipo de contacto sexual con un niño o cualquier comportamiento que tenga como fin excitar a la persona que comete el abuso. Por lo tanto, no sólo se considera abuso sexual mantener relaciones sexuales con un niño, tocar los genitales de un niño o hacer que el niño le toque los genitales a otra persona; el abuso sexual también significa:
hacer que un niño pose o esté involucrado en acciones para fotografías pornográficas o videos
contar chistes o historias con connotación sexual
mostrar material pornográfico a un niño
obligar a un niño a desnudarse
«exponerse» ante un niño o mostrarle los genitales
Negligencia
La negligencia es cualquier acción, o inacción, de la persona a cargo del cuidado de un niño que causa un daño físico o emocional en un niño. Por ejemplo, no proveer de comida, calefacción, abrigo (durante los meses de invierno) o una vivienda adecuada, es considerado un acto de negligencia. Básicamente, cualquier cosa que interfiere con el desarrollo y el crecimiento del niño es considerado un acto de negligencia. Esto también incluye:
No proporcionar atención médica cuando el niño está lesionado o enfermo
Encerrar a un niño en una habitación.
Colocar a un niño en una situación de peligro donde pueda lesionarse físicamente u ocasionar la muerte
El abandono es un tipo de negligencia. Esto ocurre cuando se deja a un niño solo durante un período de tiempo prolongado o cuando sufre un daño serio ya que nadie lo estaba cuidando.
Abuso emocional
El abuso emocional o psicológico es un patrón de conducta que tiene un efecto negativo en el desarrollo emocional y en la autoestima del niño. Ignorar al niño o no demostrar sentimientos de amor, apoyo u orientación es considerado abuso emocional. También lo es amenazar, atemorizar, denigrar o criticar constantemente a un niño.
Abuso de sustancias
El uso de alcohol, tabaco o drogas prohibidas puede dificultar el buen juicio de la persona a cargo del cuidado del niño y como consecuencia de ello, poner en peligro al niño o cometer un acto de negligencia o abuso físico.
Perfil de la persona que comete un abuso
La realidad es que la persona que abusa de niños proviene de diferentes condiciones sociales , culturales y económicas. Pueden ser padres, otros miembros de la familia, maestros, entrenadores y amigos de la familia. Prácticamente, cualquier persona que tiene acceso a un niño puede maltratarlo.
Signos de advertencia de que un adulto puede estar maltratando o abusando a un niño:
En este dibujo se muestra el rostro de la persona que maltrata a la menor, evidenciando el rostro desfigurado de la persona agresora, así como las palabras que utilizaba con la menor para agredirla física y emocionalmente.
En el rostro del hombre se nota la mirada de maldad y el dibujo describe como lo ve el niño que estaba siendo abusado. Muestra dos rostros, indican los expertos que era como se comportaba frente a los demás y como se transformaba cuando estaba solo con el niño.
Además hay que tomar en cuenta estos detalles:
Tratan a los niños con menosprecio
Tienen comportamientos extraños con los niños y con la pareja.
El tema sexual les resulta bastante interesante tocar.
No les gusta hablar de las conductas extrañas de los niños, para evitar caer en sospechas.
Mienten constantemente.
Crear control excesivo en los niños para que no hablen con nadie más para no ser descubiertos.
Estas personas algunas veces han sido también abusados, o vienen de familias de abusadores y es un patrón de conducta.
No puede explicar o da explicaciones raras por las lesiones del niño
Habla del niño de manera negativa
Utiliza disciplina fuerte
Tiene problemas de alcohol o drogas
Posee problemas emocionales o enfermedad mentales
Mantiene mucho estrés
No se preocupa por el cuidado o la higiene del niño
No parece querer al niño ni preocuparse por él/ella
Si el niño lo dice, escúchale y tómale en serio. Los niños muy pocas veces inventan historias de abuso sexual.
No le presiones a hablar, pero él lo hará en su momento. Apoya al niño evitando gestos, preguntas o juicios que le hagan sentirse aún más angustiado o culpable
Si el niño o niña decide hablar, anímale y muéstrale confianza para que diga la verdad y hable con libertad.
No lo juzgues, ni lo hagas sentir culpable.
Solicita apoyo a algún especialista para ayudar al niño y también a la familia en la forma que debe tratar el problema.
Prepara al niño para esa ayuda. Explícale que tendrá que conversar con otras personas de lo sucedido. Y que todo será muy bueno para él.
Se debe denunciar ante las autoridades a la persona que abusó sexualmente del niño.
DENUNCIA este hecho a las autoridades correspondientes. En Guatemala puede ser a la Policía más cercana, el Ministerio Público (2411-9191 ), Procuraduría de los General de la Nación (Teléfono:
2414-8787 extensión 6014 Teléfono de turno: 4987-2285)